miércoles, 21 de octubre de 2009

Sherlock Holmes

Y yo le decía: "Pero Holmes, que ya eres grande para andar leyendo historias de Sherlock Holmes, que tú eres mucho más listo que todo esto. Que eso de Sherlock Holmes me suena a Los Mosqueperros." Y él: "Sólo lee una historia, Laurent, verás como te engancha y te gusta, y más a ti". Más de una de nuestras largas conversaciones de las que yo solía disfrutar entonces terminaba de esa manera. Era otro tiempo, el artista anteriormente conocido como Prince aún era conocido como Prince (Homer dixit), la ESO aún no había llegado para quedarse, ni siquiera era una sombra en el horizonte. Eran años de EGB y BUP (y COU) y era nuestro primer año de instituto.

Nos caímos bien instantáneamente como se caen bien dos amigos que ya lo son antes de conocerse y teníamos una relación de ésas en las que uno simplemente parece encontrarse con la otra persona como por casualidad y pasan un rato juntos, un café, una cerveza coca-cola (catorce años, recuérdese), y alrededor de éstos una conversación. Y luego simplemente hasta la próxima, sin planes, sin nada. Y siempre había una próxima.

Siempre teníamos un libro que comentar al otro y él era un fanático de Sherlock Holmes que intentaba captar adeptos a su causa, y yo era duro y cerrado de mollera. Un día no me quedó más remedio que aceptar su galantería y cogí un libro, Las aventuras de Sherlock Holmes, que me prestó y que estaba compuesto por relatos cortos en los que el detective de Baker Street hacía gala de su carisma y sus habilidades en situaciones que lo llevaban al extremo. O que parecía que lo llevaran. Él, claro, siempre iba muy por delante de la situación. Yo estaba acostumbrado al género de relato corto por culpa de Stephen King y disfrutaba mucho de él, así que caí en las redes de Holmes instantáneamente. Su fría lógica, su carisma sutil, su dominio de la situación. Sí, era joven e impresionable.

Y hoy en día me sigue gustando mucho este personaje y es por eso que estoy de enhorabuena. En el mundo de la tele, en donde está de moda el personaje, tengo donde elegir ya que he detectado a Holmes en al menos cuatro series: House, no es ningún secreto, los productores mismos ya lo dijeron que eligieron el nombre House porque fonéticamente es parecido a Holmes y Wilson, oviusli, es Watson. La serie la dejé de ver debido a mi hipocondría. El Mentalista, de las cuatro que voy a nombrar es mi favorita. Un personaje carismático, simpático y motivado por la venganza, qué más se puede pedir. Shark, el abogado interpretado por James Woods es otro ejemplo más de Holmes. Personalmente me gusta bastante esta serie aunque le he perdido el hilo: tendré que recuperarlo. Y por último Miénteme, aunque no he visto la serie aún la verdad es que Tim Roth no me resulta tan simpático como los otros tres actores (sin razón aparente) y me parece que no aporta nada nuevo con respecto, por ejemplo, de El Mentalista y por eso soy algo reacio a verla.

Y por último y por si fuera poco, las dos pelis sobre el personaje que van a salir en breve; una en clave de humor y la otra más seria protagonizada por Robert Downey Jr en el papel de Holmes y Jude Law en el de Watson. He de decir que he visto en póster de Downey Jr y la pose es igualica que la de Simon Baker cuando hace de El Mentalista. Me va a gustar sí o sí.

2 comentarios:

THE KICKFACE FAMILY ! dijo...

Yo me enganché con "El sabueso de Baskerville".
Un personaje increiblemente bueno, que su creador llegó a odiar.

¿Sabias que lo "Resucitó" por la cantidad de peticiones de sus lectores?

Laurent dijo...

Conocía las anécdotas que me cuentas y no sé si conoces la de que Conan Doyle aplicó sus conocimientos detectivescos-sherlockholmescos a la "vida real" en un caso de su vecindario, resolviéndolo positivamente.